El crecimiento accidental en la intención del voto limeño por Susana Villarán ha traído al debate la relevancia de una opción política que dicha candidata presenta como "izquierda moderna". Sin embargo, si uno revisa sus declaraciones y propuestas, e identifica a sus propulsores, se encuentra con la triste realidad de que abundan más los rezagos del pasado, y que la supuesta modernidad es de utilería. En su afán por llamar la atención de los pobres (ahí donde no pasa del 5%), Villarán predica la insistencia en un programa social caduco (Vaso de Leche) que ha generado corrupción antes que niños sanos. Su aproximación a los sectores D y E es digna de monjas caritativas o de tías del Golf que lavan sus culpas ensuciándose los zapatos en los arenales. Sus visitas de médico a los comedores populares conmueven tanto como Boloña durmiendo entre esteras.
Su alianza con sectores fundamentalistas no le permite mirar adelante. ¿Quién le dijo que la izquierda tenía que unirse, cuando lo que se necesita es zanjar de una vez con los errores de sus autodenominadas "viejas glorias" que nunca cambiarán? ¿Quién dice tener un discurso basado en la honestidad pactando con quienes controlan las argollas de la Derrama Magisterial y obstruyen la transparencia en la gestión pública? (A ver, que PR maneje el presupuesto participativo de Lima). Además, la supuesta renovación de cuadros es falaz, porque esas "jóvenes promesas" son en realidad chiquiviejos-manos-blancas que creen que ser de izquierda es tutear a su empleada (que no tiene seguro social) y vestirse con look novoandino.
El país necesita una izquierda realmente moderna, popular en serio (ni paternalista, ni obligada por el "affirmative action"), que se acerque a los barrios con horizontalidad (no como policía femenina ni promotora de ONG feminista); que deje a un lado el inútil discurso del emergente (que sólo sirve para pedir plata a la cooperación-small-is-beautiful); que no se pierda en disquisiciones del siglo pasado (¿Fidel o no Fidel?); que se libere tanto de post-violentistas como de socialconfusos; que deje el discurso participativo ingenuo (¿qué es eso que tan ligeramente consideras "pueblo"?); que cimiente una ciudadanía liberal (deja de llamar "pobladores" a la gente de D y E y "ciudadanos" a tus amigos que te acompañan en tus marchitas); que sepa interpretar el capitalismo contemporáneo (ya olvídate del rollo soso de la Economía Solidaria, que sólo sirve para que Mocha vaya a Brasil a florear a Boaventura Dos Santos); que se acerque al mercado amparado en la legalidad de las instituciones (¿alguien de tus patas ha abierto una microempresa exitosa? No vale convertir tu casa en centro cultural para que tus amigos escuchen jazz); que respete los derechos pero también ponga orden (¿o es que el orden es monopolio de la derecha?).
El país no necesita un remake de Izquierda Unida, sino una izquierda inédita. Quisiera una izquierda que rompa con sus argollas, que divida, que sincere. "Soy una Bachelet", dice Villarán, cuando en todo caso habría que escuchar a Enríquez-Ominami ("Somos una generación post Guerra Fría, donde la democracia y la economía mixta son las premisas"). Una izquierda joven a la que no se le pueda echar en cara ningún roche. Eso no es Fuerza Social por ningún lado, que lo único de "moderno" que tiene son las confesiones nostálgicas de aficionados a la marihuana.
Publicado el 21 de Agosto en Correo
Su alianza con sectores fundamentalistas no le permite mirar adelante. ¿Quién le dijo que la izquierda tenía que unirse, cuando lo que se necesita es zanjar de una vez con los errores de sus autodenominadas "viejas glorias" que nunca cambiarán? ¿Quién dice tener un discurso basado en la honestidad pactando con quienes controlan las argollas de la Derrama Magisterial y obstruyen la transparencia en la gestión pública? (A ver, que PR maneje el presupuesto participativo de Lima). Además, la supuesta renovación de cuadros es falaz, porque esas "jóvenes promesas" son en realidad chiquiviejos-manos-blancas que creen que ser de izquierda es tutear a su empleada (que no tiene seguro social) y vestirse con look novoandino.
El país necesita una izquierda realmente moderna, popular en serio (ni paternalista, ni obligada por el "affirmative action"), que se acerque a los barrios con horizontalidad (no como policía femenina ni promotora de ONG feminista); que deje a un lado el inútil discurso del emergente (que sólo sirve para pedir plata a la cooperación-small-is-beautiful); que no se pierda en disquisiciones del siglo pasado (¿Fidel o no Fidel?); que se libere tanto de post-violentistas como de socialconfusos; que deje el discurso participativo ingenuo (¿qué es eso que tan ligeramente consideras "pueblo"?); que cimiente una ciudadanía liberal (deja de llamar "pobladores" a la gente de D y E y "ciudadanos" a tus amigos que te acompañan en tus marchitas); que sepa interpretar el capitalismo contemporáneo (ya olvídate del rollo soso de la Economía Solidaria, que sólo sirve para que Mocha vaya a Brasil a florear a Boaventura Dos Santos); que se acerque al mercado amparado en la legalidad de las instituciones (¿alguien de tus patas ha abierto una microempresa exitosa? No vale convertir tu casa en centro cultural para que tus amigos escuchen jazz); que respete los derechos pero también ponga orden (¿o es que el orden es monopolio de la derecha?).
El país no necesita un remake de Izquierda Unida, sino una izquierda inédita. Quisiera una izquierda que rompa con sus argollas, que divida, que sincere. "Soy una Bachelet", dice Villarán, cuando en todo caso habría que escuchar a Enríquez-Ominami ("Somos una generación post Guerra Fría, donde la democracia y la economía mixta son las premisas"). Una izquierda joven a la que no se le pueda echar en cara ningún roche. Eso no es Fuerza Social por ningún lado, que lo único de "moderno" que tiene son las confesiones nostálgicas de aficionados a la marihuana.
Publicado el 21 de Agosto en Correo
Susy es una tía superbacán. Lean la invitación a la Cena y, si se animan, no dejen de ir.
ReplyDeleteParafraseando a Dargent (que ayer fue su despedida). Los izquierdistas modernos tendrán que condenar a esa izquierda que mira la democracia estratégicamente. A esa izquierda que en silencio considera este sistema como una democracia burguesa y formal.
ReplyDeleteFuerza social me hace recordar a un concierto punk en los ochenta. Por un lado, los "pituco-punk" y por el otro lado los "cholo-punk". Sólo los une la música (y eso...) O no??
white handed no suena tan bien en castellano, lo hubieras dejado como white handed
ReplyDeleteJorobado , ¿viste a la tía Susy en El especial del humor?
ReplyDeleteTe pago doble Aldito por esta columna? O solo te puso una estrellita en la frente?
ReplyDeleteMe está haciendo el bajo con Sofia Franco.
ReplyDeleteAdemás, la supuesta renovación de cuadros es falaz, porque esas "jóvenes promesas" son en realidad chiquiviejos-manos-blancas que creen que ser de izquierda es tutear a su empleada (que no tiene seguro social) y vestirse con look novoandino.
ReplyDeleteEl país necesita una izquierda realmente moderna, popular en serio (ni paternalista, ni obligada por el "affirmative action"), que se acerque a los barrios con horizontalidad (no como policía femenina ni promotora de ONG feminista)
cimiente una ciudadanía liberal (deja de llamar "pobladores" a la gente de D y E y "ciudadanos" a tus amigos que te acompañan en tus marchitas);
mucho prejuiciooooo no te parece......, la izquierda no esta conformada solo por tus amigos o conocidos jua
Pareces friqueadazo ...muy bueno tu modelito de "izquierda moderna"
ReplyDeleteLes voy a pasra el talán a la gentita de Quillabamba, Bagua, Moquegua, Arequipay para que lo tengan en cuenta ahora que se viene lo del Gas ja ja ja
Dicho sea de paso ña "derrama" manejada por "patria roja" desde hace 40 años ha sido mejor administrada que por ejemplo el Wiese, Latino, Mercantil, AFPs...asi que ajusta nomás felipillin con Susana.
Al margen del apanado a Susana Villarán, me parece que tu critica a la izquierda, también se puede aplicar a la derecha, entonces lo que debemos desearle al Perú es una nueva forma de hacer política: “Una [política] joven a la que no se le pueda echar en cara ningún roche” y “que rompa con sus argollas, que divida, que sincere.” Eso sobretodo, que se sincere que se deje de rollos, que hable y se discuta de capitalismo contemporáneo, pero también de socialismo. Creo que a partir de ahí se puede dar eso que tantos reclaman: un debate de ideas. Eduardo Malpica R
ReplyDeleteYo tampoco voy a botar por la tia Susana, mas que todo por esos aliados de Patria Roja que tanto daño le hacen a la mediocre educación publica
ReplyDeleteCOnfimado: Wilfredo Ardito está organizando una protesta en la puerta del local de Fuerza Social en Jesús María, protestando contra la presencia de Susana en El Especial del Humor (ahi donde salen La PAisana y el negro Mama).
ReplyDeleteY de ahi se pasan al Canal 4 para protestar conra el Torero del programa de Gisella.
Yo escribí este correo en respuesta a tu artículo que me llegó por correo. Tuve que googlear el texto para saber quién lo había escrito. No es una crítica en sí mismo o defensa a SV, porque, como explico, no estoy aún al tanto del debate. Mi crítica es a la forma de tu artículo. Lo copio acá. Y de paso, afirmo mi coincidencia con Eduardo Malpica que opinó comentarios antes:
ReplyDeleteEl mail que mandas, Gonzalo (el amigo que me mandó el mail), lamentablemente, es solo un conjunto de ataques que no tienen un sustento real. Básicamente se sostienen en el prejuicio, que tanto pretende la nota criticar.
No estoy defendiendo la candidatura de Susana Villarán, pero tampoco atacándola. Estoy hace meses fuera de Lima y la verdad es que bastante desconectada de cuestiones electorales. Sin embargo, iré a votar y estoy en estos días disponiéndome a ponerme al día en el debate y formar una opinión decente para poder votar (o viciar mi voto) con cierto decoro.
Sin embargo, estoy cansada de vivir en un país donde la gente no dialoga sino ataca, donde se generaliza bajo patrones de racismo o anti racismo o supuesto conocimiento de cómo funciona todo un sector social, en este caso alguno que "trata a la empleada de tú, pero no le da seguro social"... por ejemplo. Ya es hora de que nos relacionemos como individuos y no como generalidades... Ya es hora de que un mail de crítica vaya directo a las propuestas y no solo a los "modales" o patrones de un determinado candidato. Estoy de acuerdo con que todos debemos ser considerados ciudadanos... sin duda... ese no es el punto y estoy de acuerdo con que podemos criticar maneras y modales de uno u otro candidato, pero centrarnos en ello y no en lo central, empobrece el discurso.
¿Alguien vio el proyecto de Camila Benavides acerca del Metropolitano? Necesitamos no solo criticar, sino proponer, enriquecer, lo cual, por supuesto, no quiere decir cerrar los ojos.
Tengo algunas preguntas, ¿en qué consiste la caducidad del Vaso de Leche? ¿Por qué las visitas a determinados sectores por parte de un candidato tienen que conmover? ¿Por qué cerrar sin nada constructivo y solo este relacionar a la gente con "marihuana", pequeña caza de brujas a la que asistimos tal vez...?
Cuando sepa más de las propuestas, podré opinar directamente, por ahora básicamente me remito a las formas e intenciones. Creo que es momento, como dije antes, de que dialoguemos y no solo ataquemos sobre la base del prejuicio.
Paulina Chirif Camino
Estás pasando por alto que...
ReplyDeleteEl vaso de leche ¡Lo hizo bien!
Ministra de la Mujer ¡Lo hizo bien!
Los derechos humanos ¡Lo hizo bien!
Los derechos del niño ¡Lo hizo bien!
Al margen de estas pegajosas huadas, escribo porque no entendí varias cosas de aquí:
- "PR maneje el presupuesto participativo de Lima" ¿Qué es PR?
- "esas "jóvenes promesas" son en realidad chiquiviejos-manos-blancas" ¿Estás criticando a los "pituquitos de Migafgogues"? Si es así, ¿no te parece un poco racista?
- ¿Qué es "affirmative action"?
- ¿small-is-beautiful? ¿A qué te refieres con pequeño es bonito?
- En el programa de Jaimito Gayly daban a entender que se distanciaba de la 'izquierda' de Chavez, o sea es No Fidel.
- ¿Quién es Mocha y por qué va o iría a Brasil a florear a Boaventura Dos Santos? Además si ese brasileño es un sociólogo importante para Brasil, ¿qué tiene que ver con el tema?
- No creo que haya que encasillarla como marihuanera nostálgica. Fumó un par de tronchitos hace cuchumil años y de ahí no pasó, para tal caso los de la derecha le siguen dando al asunto.
- ¿Por-qué-abusas-del-guión?
Y a los que comentan:
A Melgar: ¿Quién es Dargent?
A Angobaldo: "White handed" es ¿el blanco entregó?
A Paulina Chirif: Yo no he visto el proyecto de Camila Benavides pero para empezar ¿quién joracas es? Googlé el nombre y no me sale alguien en particular.
Finalmente: Lourdes está cagada con el narco y con Salazar Monroe. Papitas Lay no me convence aún, Iberico no jodas, si se cabreó con la Grossman como alcalde será chicheñó. Androide aún es pitufo en las encuestas.
Pues sólo queda Villarán.
Alguna idea sobre el "nuevo" candidato, remplazo de Alex Kouri, el intelectual (???) Fernan Altuve ... bueno, si es intelectual pero no es de izquierdas ... se puede? Claro que si ... probablemente sea el mas cultivado de todos, pero tiene el carisma de una piedra pomez
ReplyDeleteNo sé ... Kouri esta haciendo control de danhos y va a ganar finalmente con todo esto, entre los candidatos solo se ha escuchado hasta hoy generalidades ... Susana Villaran esta exponiéndose demasiado en los medios, su imagen se esta envileciendo y la verdad aunque quiera alimentar su perfil "popular", no la veo ...
En fin ... Barrantes 2010
- "PR maneje el presupuesto participativo de Lima" ¿Qué es PR?
ReplyDelete- que es presupuesto participativo?
(wikiwiki)
ReplyDeleteEl presupuesto participativo es una herramienta de democracia participativa o de la democracia directa que permite a la ciudadanía incidir o tomar decisiones referentes a los presupuestos públicos, generalmente sobre el presupuesto municipal.
PR = Patria Roja
Jorobado. Por este artículo, ¿Aldo M te está haciendo el bajo con Sofía Franco? No, pues. Tú orgulloso crema ¿recogiendo la carne saboreada por harto pavo? En fin. Salvo que quieras un trío con Peluchín.
ReplyDeleteLo que pides para la izquierda lo queremos todos. Pero para hacer justicia, deberías hacer lo mismo con la cretásica derecha. Y ahí hay harto material. No caigas en la visión dicotómica de tu director, que ayer despotrica de Enríquez-Ominami, el prototipo de la izquierda moderna en Sudamérica.
¿Soy yo o es que de verdad estos dos artículos sobre el reciente libro de Federico Prieto Celi son muy parecidos, extremadamente y raramente parecidos?
ReplyDeleteAldo M.
http://www.correoperu.com.pe/correo/columnistas.php?txtEdi_id=4&txtSecci_parent=&txtSecci_id=84&txtNota_id=418707
Raúl Mendoza Cánepa
http://raul.lamula.pe/2010/08/26/asi-se-hizo-el-peru/#comments
¿quién influyó a quién?
Querido, te estás equivocando.
ReplyDeleteSusana y su izquierda moderna es mucho mejor que la derecha de mierda como Lourdes.
Tienes razón que el vaso de leche es pura corrupción, pero a mi parecer Villarán toma en cuenta a la Lima ignorada, la Lima que la derecha no ve.
Jorobado, La tia Susy tendra sus defectos, es medio pituca, su imagen de "derechohumanista" no me cuadra, Pero te pregunto:
ReplyDelete¿La derecha(y el resto de la izquierda)peruana es mejor? Si conoces un candidato mejor dimelo, y no te me demores muchos años.
En serio, comparada con otros politicos: la tia Susy es un angel.
PD: asociarla con Patria Roja es un golpe bajo, y la derecha luego se pone a patalear cuando los asociando con Fujimori